Caso

(Tomado de la Competencia Intercolegial de Alegatos organizada por la Universidad de San Andrés)

“Te hacemos los deberes”

En marzo de 2009, comenzó a operar en nuestro país la empresa “Contá Conmigo”, dedicada a brindar asesoramiento académico a alumnos de colegios secundarios a través de Internet. El principal servicio prestado por esta empresa consiste en realizar los deberes para el hogar que le han sido asignados a un estudiante a cambio de una suma de dinero. Así, por ejemplo, Contá Conmigo resuelve un problema matemático por $20, escribe una composición por $50, resuelve un ejercicio de química por $20, analiza oraciones por $30 por página o responde preguntas de educación cívica por $10 cada una.

El servicio se brinda a través de Internet. Los estudiantes envían por e-mail la consigna a través de un link situado en la página Web de la empresa y luego la reciben resuelta por esa misma vía en su casilla de correo electrónico. En general, la respuesta no tarda más de dos horas. Los estudiantes usuarios del servicio pueden pagar las tarifas correspondientes on-line mediante una tarjeta de crédito o débito, o pueden comprar en efectivo una tarjeta prepaga similar a la que se usa para los teléfonos celulares en distintos puntos del país designados a tal efecto.

En abril de 2009, docentes de distintos colegios secundarios del país comenzaron a notar que muchos estudiantes que antes no entregaban los deberes o no lograban resolverlos adecuadamente, comenzaron a hacerlo de manera habitual y sin errores. Esto, que un primer momento parecía una razón de alegría, pronto se convirtió en una grave preocupación. En efecto, los docentes, al intercambiar experiencias, se dieron cuenta de que algo extraño estaba ocurriendo. Finalmente, uno de ellos se enteró de la existencia de Contá Conmigo y ahí se develó el misterio. Resultaba evidente que era gracias al uso de los servicios de esta empresa que algunos alumnos estaban cumpliendo sus tareas con tanto éxito. Los docentes comenzaron a indagar al respecto, y aunque la mayoría de los alumnos sospechados lo negó, algunos pocos confesaron que estaban recurriendo con alguna frecuencia a Contá Conmigo.

A partir de ese momento, distintos colegios plantearon su preocupación a las autoridades. Finalmente, en mayo de 2009, el Ministerio de Educación de la Nación emitió una resolución en la que prohibía terminantemente el uso de los servicios de resolución de deberes brindados por Contá Conmigo, o cualquier servicio semejante, en todo el territorio de nuestro país. Esta Resolución indicaba que las autoridades provinciales competentes debían tomar las medidas pertinentes para que los alumnos que violaran esta prohibición fueran sancionados con la expulsión por todo el ciclo lectivo en curso.

Esta Resolución del Ministerio de Educación de la Nación y las normas provinciales cuyo fin era hacer efectiva dicha resolución en cada jurisdicción fueron ampliamente difundidas en todos los establecimientos educativos públicos del país. A partir de entonces, los docentes notaron que las cosas tendían a volver a la normalidad, es decir, que en general el nivel de rendimiento de los alumnos a la hora de cumplir con sus deberes volvía a los niveles previos al establecimiento de Contá Conmigo. Sin embargo, había unos pocos casos concretos en los que los docentes creían que los alumnos seguían recurriendo a los servicios de Contá Conmigo.

En algunos casos muy aislados –cinco en total– los alumnos, presionados por sus padres, confesaron la falta. Esos cinco alumnos fueron expulsados, tal como disponía la normativa descripta. Sin embargo, en la mayoría de los casos los alumnos sospechados negaban rotundamente la utilización de Contá Conmigo. Aunque tales negativas no convencían a los docentes, las autoridades carecían de pruebas para sancionar a estos alumnos.

Para remediar esta situación, el 15 de junio de 2009, el Ministerio de Educación de la Nación decidió solicitar a Contá Conmigo que le entregara la lista de todos sus clientes desde marzo de 2009. Contá Conmigo se negó. En consecuencia, el Ministerio optó por presentar una demanda ante un juez para que éste ordenara a Contá Conmigo que entregara la lista completa de los usuarios del servicio de resolución de deberes y que se abstuviera de brindar este servicio en lo sucesivo. La empresa demandada, Contá Conmigo, alegó que no estaba obligada legalmente a brindar tal información ni a interrumpir el servicio en cuestión. Más aún, solicitó al mismo juez que le ordenara al Ministerio demandante que se abstuviera en lo sucesivo de tomar acciones que interfirieran con su negocio, tales como amenazas de sanciones a los usuarios de sus servicios o instrucciones a las autoridades provinciales para que adoptaran dichas sanciones o cualquier otra acción semejante.

Ahora, un tribunal deberá decidir la cuestión. Para hacerlo, ha convocado a una audiencia en la que las partes deberán defender oralmente sus posiciones.